Teherán, 3 feb (dpa) – El ministro de Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, inició su visita a Irán instando a Teherán y Arabia Saudí a tener una postura constructiva en las negociaciones de paz de Siria.
«Si esto se sale de control, todo lo que hemos podido encauzar en las últimas semanas y meses para lograr una posible solución para Siria podría quedar destruido», advirtió Steinmeier en Teherán, desde donde luego se trasladará a Arabia Saudí.
El ministro se reunió con su par local, Mohamed Yawad Zarif, que se mostró dispuesto a trabajar para rebajar las actuales tensiones con el Gobierno saudí.
En una conferencia de prensa conjunta, Zarif aseguró que su país tiene voluntad de hallar una solución, pero, acotó, «Riad no (tiene la misma disposición), sino que busca agudizar la crisis».
El presidente iraní, Hassan Rohani, también dijo no ver señales de distensión por parte de Riad. En declaraciones transmitidas por la televisión pública, el mandatario aseguró que Arabia Saudí aplica una política «que no tiene nada que ver con la vecindad, las raíces islámicas y las relaciones históricas». Es «políticamente inmaduro», aseguró.
Si bien aseguró que «Irán es una gran nación que puede perdonar (…) siempre y cuando los errores cometidos sean corregidos», advirtió, endureciendo tajantemente el tono, que si Riad no opina igual «los saudíes lo lamentarán».
Las relaciones bilaterales están en un momento de gran tensión desde que Arabia Saudí ejecutó a un clérigo chiita. A eso le siguió un ataque a la embajada saudí en Irán que provocó la ruptura de los lazos diplomáticos.
Irán es mayormente chiita, mientras que Arabia Saudí es el país sunita de mayor peso en el mundo árabe.
Steinmeier llamó a las partes a estar a la altura de su intervención en las conversaciones sirias al ser actores regionales clave.
Las conversaciones por Siria comenzaron el viernes en Ginebra, tras largas disputas sobre quiénes participarían en representación de las partes.
Steinmeier se reunirá este miércoles con el presidente Rohani, que visitó recientemente Italia y Francia tras el levantamiento de las sanciones económicas que pesaban sobre el país a raíz de su programa nuclear.