Berlín, 31 ene (dpa) – BMW es el último fabricante alemán de automóviles de lujo que ha decidido implantar una fábrica de motores en China. Siguiendo la estela de Audi y Mercedes-Benz (Daimler), BMW inauguró una planta junto con su socio chino Brilliance Automotive.
La fábrica de Shenyang, al noreste de China, está equipada con una fundición de metal ligero casi libre de emisiones para producir la última generación de motores turbo de gasolina de tres y cuatro cilindros de la marca. También se fabricarán baterías para los vehículos híbridos.
Se espera que la factoría de BMW Brilliance Automotive BBA emplee a 2.000 trabajadores y que suministre motores a la empresa asociada Dadong y a las plantas de montaje de Tiexi.
«La nueva planta de motores refuerza nuestro firme compromiso con el mercado chino», dijo el jefe de producción de BMW, Oliver Zipse, en la reciente ceremonia de apertura de la fábrica.
Los motores producidos en China utilizan el sistema de producción estandarizada de BMW para motores modulares que también se realizan en las plantas de Múnich, Steyr en Austria y Hams Hall en Gran Bretaña. La marca persigue una estrategia de ahorro de costes a través de economías de escala.