Neubrandenburg (Alemania), 30 ene (dpa) – La canciller Angela Merkel confió hoy en que la reforma del derecho de asilo acordada en Alemania reducirá el flujo de refugiados, pero insistió en que la crisis sólo se resolverá con el esfuerzo conjunto de toda Europa.
Hablando en un congreso regional de su Unión Cristianodemócrata (CDU) en Mecklemburgo-Antepomerania, Merkel insistió en urgencias como un control eficaz de las fronteras exteriores de la Unión Europea (UE) y un reparto justo de refugiados entre los países miembros del bloque.
Por el contrario, la canciller criticó el cierre de las fronteras interiores de la UE y alertó contra sus consecuencias.
«El precio para un país que se cierra por completo -en el caso de que lo logre- es para un caso como el de Alemania sufrir un revés en su dinamismo económico», sostuvo Merkel.
El espacio Schengen permitió una intensa circulación de bienes y personas, recordó la jefa de la CDU. Quien quiera volver a los controles y a frenar ese intercambio debería preguntarse: «¿Hacia dónde queremos llevar Europa?», advirtió la canciller.
Merkel impulsó una política liberal para la acogida de refugiados, en parte responsable de que Alemania recibiera 1,1 millones de solicitantes de asilo sólo en 2015, provenientes en su mayoría de Siria, Afganistán o Irak.
La canciller viene soportando una creciente presión para rectificar su curso. El jueves, su coalición de Gobierno acordó nuevas restricciones a la ley de asilo para intentar disminuir el flujo de refugiados.