Darmastadt (Alemania), 3 dic (dpa) – La Agencia Europea del Espacio (ESA) puso hoy en órbita el satélite «LISA Pathfinder» para preparar un gran proyecto con el que tratará de captar por primera vez la existencia de ondas gravitacionales y de confirmar, así, nuevos aspectos de la teoría de la relatividad general de Albert Einstein.
«Estas investigaciones sirven para entender mejor el mundo en el que vivimos», dijo el director general de la ESA, Johann-Dietrich Wörner. «Las teorías de Einstein siguen siendo hoy extremadamente impresionantes», aclaró.
Paul MacNamara, el jefe del proyecto en la ESA, mostró su alegría porque «tras muchos años de desarrollo y pruebas en la Tierra, por fin llega el bautizo de fuego, que solo puede tener lugar en el espacio».
El satélite recopilará información para preparar el gran observatorio espacial europeo, planeado para dentro de 20 años, que seguirá la pista de las ondas gravitacionales como no ha podido hacerse hasta ahora.
Hará, a una escala mucho menor, lo mismo que se pretende con el gran observatorio espacial dentro de 20 años. Contiene dos cubos, de dos kilos de peso cada uno, hechos de una aleación de oro y platino y situados a 38 centímetros. Un haz de luz láser entre ambos cubos servirá, según los planes, para detectar el posible efecto de las ondas gravitacionales.
El «LISA Pathfinder» alcanzará su meta en febrero, unos 1,5 millones de kilómetros en dirección al sol. Allí comprobará las tecnologías de micropropulsión que se usarán para controlar esos cuerpos en el espacio, así como la fiabilidad de la medición láser.
Servirá, además, para aquilatar resistencia de los materiales y las estructuras que se quieren enviar al observatorio. No se espera que permanezca operativo mucho más de un año.
Las ondas gravitacionales son una de las fuerzas más difíciles de medir en el universo. Se propagan en el vacío a la velocidad de la luz y curvan el espacio como lo hacen en la superficie de un lago las ondas causadas por una piedra que se sumerge.
Según formuló Einstein en su teoría a relatividad general, todos los cuerpos acelerados emiten estas ondas gravitacionales, que serán mayores cuanto mayores sean la masa y la velocidad del cuerpo que las causa.
Aunque nunca se ha conseguido medirlas directamente, entre los astrofísicos apenas hay dudas de su existencia.
El satélite despegó a las 4:04 GMT de hoy de la base de la Guayana Francesa, a bordo de un cohete Vega. El lanzamiento tuvo que retrasarse un día por problemas técnicos. Las actividades del «LISA Pathfinder» se supervisarán desde el centro de control Esoc que la ESA tiene en la localidad alemana de Darmstadt.