El presidente interino de Siria, Ahmed al-Sharaa, será recibido este lunes 10 de noviembre en la Casa Blanca por su homólogo estadounidense, Donald Trump. La visita supone el primer encuentro oficial entre un mandatario sirio y un presidente de Estados Unidos desde la independencia del país árabe en 1946.

Fin de sanciones y nueva etapa diplomática
El viaje se produce tras la decisión del Consejo de Seguridad de la ONU, aprobada el 6 de noviembre, de levantar las sanciones personales impuestas a Al-Sharaa y al ministro del Interior sirio, Anas Hasan Khattab. La resolución fue respaldada por 14 de los 15 miembros del consejo, con la abstención de China.
El embajador estadounidense ante la ONU, Mike Waltz, impulsó la propuesta y aseguró que la medida representa “una fuerte señal política que reconoce que Siria está en una nueva era desde que Al Assad y sus asociados fueron derrocados”.
Reintegración de Siria a la coalición internacional
Durante la jornada se prevé que Siria formalice su incorporación a la coalición internacional antiterrorista encabezada por Washington. Según Tom Barrack, enviado especial de Estados Unidos para Siria, el acuerdo busca consolidar el compromiso de Damasco en la lucha contra organizaciones extremistas.
El Gobierno sirio también pretende asegurar apoyo financiero internacional para su reconstrucción nacional, valorada en más de 216.000 millones de dólares, según datos del Banco Mundial.
Al-Sharaa llegó a Washington el sábado 8 de noviembre, acompañado por varios miembros de su gabinete. En la agenda figuran el fortalecimiento de canales diplomáticos y la posible integración de las Fuerzas Democráticas Sirias en el nuevo ejército nacional. El Ministerio del Interior sirio informó de 61 redadas y 71 detenciones en distintas provincias, incluida Damasco.
Acuerdos con Israel y perspectivas regionales
Trump y Al-Sharaa ya se habían reunido en mayo en Riad, donde se anunció el levantamiento parcial de sanciones económicas. Posteriormente, una orden ejecutiva en Washington anuló medidas que impedían a Siria acceder al sistema financiero internacional, aunque las más restrictivas, ligadas a la Ley César, siguen pendientes de revisión.
La reunión en la Casa Blanca también abordará los contactos entre Damasco e Israel. Washington impulsa la adhesión de Siria a los Acuerdos de Abraham, firmados en 2020 por varios países árabes e Israel. Aunque ambos países mantienen un estado de guerra formal, el Gobierno de Al-Sharaa inició conversaciones indirectas con mediadores regionales.
El embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, declaró que la resolución “refleja los intereses y aspiraciones del propio pueblo sirio”. Por su parte, el delegado sirio Ibrahim Olabi calificó la medida como “un mensaje de apoyo a los sirios en su esfuerzo por reconstruir su patria y restaurar sus vidas”.
Con información de NotiPress.
