La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) autorizó la opa de BBVA sobre el Banco Sabadell con una serie de compromisos para paliar los problemas de competencia detectados.

Tras 11 meses de análisis en el seno del organismo, la Sala de Competencia de la CNMC dio luz verde el miércoles a la opa tras finalizar la fase dos de estudio, con lo que el expediente llegará a manos del Gobierno, que decidirá si añade condiciones sustentadas en el interés general y no en razones de competencia. Tiene 15 días hábiles para decidir si lo eleva a Consejo de Ministros y si así lo decide, dispone de un mes para estudiar el expediente.
Según Competencia, una vez concluida la investigación en segunda fase, considera que los compromisos presentados por BBVA “son adecuados, suficientes y proporcionados” para solucionar los problemas de competencia en los mercados afectados. La mayoría tendrán una duración de tres años, prorrogables por dos más en el caso del crédito para pymes, y de 18 meses en el caso de condiciones de acceso a cajeros. La CNMC supervisará el cumplimiento de los compromisos y BBVA deberá informarla en los plazos acordados para ello.
Competencia ha detectado que la operación supone una amenaza para la competencia en banca minorista y en pagos, en los que la entidad resultante supera el 30% de cuota a nivel nacional. Los riesgos identificados hacen referencia a un empeoramiento de las condiciones comerciales para particulares, pymes y autónomos; exclusión financiera; reducción del crédito a pymes; riesgo de empeoramiento en condiciones aplicadas a empresas en pagos, y empeoramiento de las condiciones de acceso a cajeros para clientes del Sabadell.
COMPROMISOS DE BBVA
Según detalló Competencia, BBVA ha propuesto una serie de compromisos. Para los códigos postales que quedarían en situación de monopolio o duopolio después de la unión de las dos entidades, se compromete a mantener las condiciones comerciales tanto particulares, como pymes y autónomos de ambas partes. Se trata de 168 códigos postales en los que la operación da lugar a un monopolio (siete), duopolio (65) y en los que la entidad resultante tendrá dos competidores (96). También se compromete a mantener la gratuidad de las operaciones de ventanilla en caso de que estas vinieran siendo gratuitas y en estos códigos postales para las pymes se compromete a mantener la política comercial en productos y precios, no cerrar oficinas especializadas del Sabadell y no ofrecer un precio superior al medio nacional para el nuevo crédito a pymes y autónomos.
Igualmente, para las pymes, se compromete a mantener el circulante de todas las que son clientes del Sabadell y el volumen de crédito durante tres años, prorrogables dos años más si así lo decide la CNMC, y a mantener el volumen de crédito a medio y largo plazo para pymes que reciban al menos el 85% de su financiación de BBVA y/o Sabadell. En Cataluña y Baleares, este compromiso se aplica a pymes que tengan al menos un 50% de su financiación con BBVA y/o Banco Sabadell. La CNMC evaluará los compromisos referentes al crédito a pymes a los tres años y determinará si los amplía por dos años más.
En pagos, BBVA se compromete a no empeorar las condiciones que los clientes pymes y autónomos tuvieran contratadas a 30 de abril de 2025 y a desinvertir los excesos de participaciones estatutarias en sociedades de gestión de pagos (Redsys, Sistema de Tarjetas y Medios de Pago, Bizum y Servired).
Respecto a las oficinas, el banco de origen vasco promete no abandonar ningún municipio en el que haya una sola oficina competidora, incluyendo ocho municipios en los que actualmente se encuentran las partes sin ningún competidor. Tampoco abandonará aquellas poblaciones en las que no exista otra oficina de la entidad resultante a menos de 300 metros de distancia, no cerrará las 35 oficinas especializadas en empresas de Sabadell, ni se irá de los municipios con renta per cápita inferior a 10.000 euros y de menos de 5.000 habitantes en los que al menos una de las partes está presente. Mantendrá horarios comerciales de oficinas que tienen servicio de caja y no cerrará cajeros donde haya un competidor o ninguno.
Sobre el acceso a los cajeros, respecto a los acuerdos de Sabadell con la red Euro6000 y Cardtronics, promete que, en caso de finalizar los mismos, se ofrezca a sus clientes acceso a ellos en las mismas condiciones y no modificará la política actual de comisiones del Sabadell en ellos.
Para clientes vulnerables, se compromete a crear y publicitar una Cuenta para Clientes Vulnerables.
Por parte de BBVA, su presidente, Carlos Torres, valoró que son compromisos que “favorecen la inclusión financiera, la cohesión territorial y el crédito a pymes y autónomos, y preservan la competencia, especialmente en los territorios en los que tendremos mayor presencia, como Cataluña”. Destacó que la fusión con el Sabadell es “un proyecto de crecimiento” con el que aumentará la capacidad de financiación en 5.000 millones adicionales al año. La nueva entidad se convertiría en la segunda en España por volumen de crédito, por detrás de CaixaBank.