Berlín, 30 abr (dpa) – Alemania necesita inversiones por valor de 721.000 millones de euros (773.720 millones de dólares) hasta 2030 para alcanzar los objetivos de transición energética del Gobierno, indica un estudio publicado hoy.
«El Gobierno alemán se ha fijado objetivos muy ambiciosos para luchar contra el cambio climático. Por ejemplo, el porcentaje de energías renovables en la generación de electricidad debe aumentar hasta el 80 por ciento en 2030», señala el «monitor de progreso de la transición energética», presentado por la consultora EY y la asociación de la industria energética BDEW.
«Se planea reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 65 por ciento respecto a 1990», agrega el análisis.
El estudio indica que, con un 49 por ciento, la expansión de la generación de electricidad renovable representa por sí sola la mayor parte de la inversión total calculada, con 353.000 millones de euros. Le sigue la ampliación de las redes de transporte y distribución, con 281.000 millones de euros.
Los expertos estimaron sumas significativamente menores para las inversiones en la red de calefacción urbana (32.000 millones de euros), en las capacidades de generación de gases verdes, para el almacenamiento y para la red básica de hidrógeno.
Metin Fidan, director del Departamento de Transformación Verde y Minería y Metales de la consultora EY en la región de Europa Occidental, comentó que las inversiones podrían generar un importante crecimiento y valor añadido regional.
Fidan añadió que esto beneficiaría a los fabricantes de bienes de equipo como turbinas eólicas, paneles solares y electrolizadores.
El informe detalla que, en comparación con el año anterior, la expansión de las energías renovables y las redes eléctricas avanzó significativamente en 2023.
Sin embargo, Kerstin Andreae, presidenta del consejo ejecutivo de la BDEW, aclaró que, a pesar de todos los progresos realizados, la presión para alcanzar los objetivos en 2030 sigue siendo alta.
«Los avances logrados para acelerar los procedimientos de planificación y aprobación son positivos. Esta tendencia debe mantenerse y reforzarse aún más», subrayó la representante de la industria energética alemana.