El Principado impulsa las excavaciones en el yacimiento de Lucus Asturum, en Llanera, tras iniciar los trámites para su declaración como bien de interés cultural (BIC). Los estudios arqueológicos que se desarrollan en la zona desde 2015 han permitido sacar a la luz y documentar un espacio termal de notables dimensiones, así como una vivienda con estancias distribuidas en torno a un patio con pozo.
La viceconsejera de Cultura, Política Llingüística y Deportes, Vanessa Gutiérrez, ha visitado este emplazamiento, ubicado en la ería de La Castañera, cerca de La Morgal, junto con el alcalde del concejo, Gerardo Sanz; el director general de Cultura y Patrimonio, Pablo León, y la responsable de los trabajos arqueológicos, Esperanza Martín.
El Gobierno de Asturias apoya esta investigación, clave para profundizar en el pasado romano de la comunidad, con una subvención de 10.000 euros incluida por primera vez en los presupuestos de 2023. Además, ha concedido a la responsable de la excavación una ayuda de 5.280 euros para el análisis arqueométrico de materiales procedentes del yacimiento, dentro de la convocatoria anual de subvenciones para proyectos arqueológicos que convoca la Dirección General de Cultura y Patrimonio.
Además de la tramitación BIC para el yacimiento, Cultura también tiene en marcha el expediente para declarar un entorno de protección para la zona, con un perímetro de 1.980 metros, que encierra un área de 194.502,2 metros cuadrados en la que se incluyen 24 parcelas catastrales donde se ha constatado la presencia de restos arqueológicos o se presume su existencia, con base en las prospecciones geofísicas, aéreas, satelitales y pedestres, así como en noticias bibliográficas y de informantes.
Presencia romana en Llanera
La fertilidad arqueológica de la zona de Llanera donde se ubica Lucus Asturum se conoce desde hace siglos, dado que ya en 1695 se refieren hallazgos. Desde entonces se han sucedido noticias sobre descubrimientos estructurales y materiales, que se intensificaron a partir de 1926, con las primeras excavaciones arqueológicas.
La investigación se ha centrado prioritariamente en el entorno de la antigua iglesia parroquial de Santa María de Lugo de Llanera y en su casa rectoral, donde se efectuaron campañas de excavación en las décadas de 1980 y 1990, encabezadas por Olávarri Goicoechea, en 1981, y por Carmen Fernández Ochoa y Rosa Cid, entre 1987 y 1995. Esas intervenciones obtuvieron resultados muy significativos. Aparte del hallazgo de una importante necrópolis de época medieval (siglos X-XII), se determinó la presencia de una ocupación del espacio en época altomedieval romana, se identificaron dos fases y se hallaron materiales tan destacados como un ara dedicada a los dioses Lares.
La presencia romana en la ería de La Castañera se constata a partir de la primera mitad del siglo I después de Cristo en torno a la vieja iglesia de Santa María y se extiende hasta el IV en el área excavada en el prao Lugo y hasta finales del V e inicios del VI, en el área de la rectoral. Resulta destacable la perduración en época tardorromana y medieval de la ocupación de este espacio, con testimonios materiales significativos, como la necrópolis de la desaparecida iglesia de Santa María de Lugo.
El topónimo Lucus Asturum se menciona por primera vez como civitas en la Geographia de C. Ptolomeo, en el siglo II después de Cristo y no vuelve a registrarse hasta su cita en el Anónimo de Rávena, como Luco Astorum, en el siglo VII. La denominación de Lucus Asturum se correspondería con dos realidades: por un lado, un núcleo de población, la civitas ptolomaica, caracterizado arqueológicamente como un vicus viarii, un aglomerado secundario de configuración dispersa asociado a la red viaria y, por otro lado, una mansio itineraria, citada en el Ravennate, sobre cuya ubicación existe consenso a la hora de localizarla en el solar y entorno de la antigua iglesia parroquial de Santa María, con una posición central sobre el territorio de Llanera.
Otros proyectos de investigación arqueológica
La Viceconsejería de Cultura subvenciona este año 12 proyectos de investigación arqueológica en Asturias, por un importe global de 78.000 euros, en una apuesta por reforzar el conocimiento sobre el pasado de la comunidad desde criterios científicos. Las investigaciones se centran en los siguientes yacimientos:
- Karst de Ardines: cuevas de Tito Bustillo y La Lloseta (Ribadesella).
- Cueva de Les Pedroses (Ribadesella).
- Cueva de La Cerrosa, en Suarias (Peñamellera Baja).
- Cueva de El Valleyu (Llanes).
- Castro del Castillón d’Antrialgu (Piloña).
- Villa romana de Andayón (Las Regueras).
- Yacimiento romano de Lucus Asturum (Llanera).
- Pico Castiello de la Mortera (Ribera de Arriba).
- Castillo de Gauzón (Castrillón).
- Palaciu (Allande).
- La Güerta de San Romano de Villanueva (Santo Adriano).
- Castello d’Arrixo o fortificación de Corveira en Figueras (Castropol).
Por otra parte, a lo largo de este año se desarrollarán intervenciones en los castros de Coaña, Mouguías (Coaña), San L.luis (Allande), Degaña y Doña Palla (Pravia), como actuaciones propias del Principado enmarcadas en el Plan Director de la Cultura Castreña.