(dpa) – ¿Puede ser eso un salero? ¿Y qué le sucedió al jarrón? ¿Se rompió? Estas son las reacciones que pueden provocar los nuevos diseños expuestos en la reciente feria de artículos de consumo Ambiente de Fráncfort. Muchos objetos cotidianos simplemente tienen una forma distinta a la que estamos habituados.
A continuación un ejemplo: imagine que encuentra un plátano vertical sobre la mesa. Pero es un salero o un pimentero. O un jarrón. Los tres, por cierto, son nuevas creaciones de Donkey Products.
O clásicos de Alessi que la empresa italiana de diseño reeditó nuevamente. Como los especieros y el sacacorchos de la serie Twergi: parecen una pequeña torre que un niño construyó con bloques de madera de colores.
¿Qué es real y qué no lo es?
«Son formas nunca vistas, pero a veces también colores nunca vistos que asombran», afirma la investigadora de tendencias Annetta Palmisano sobre estos productos. Es inevitable la sorpresa de la primera mirada. ¿Por qué hay plátanos de pie sobre la mesa? ¿Qué se olvidó el niño allí?
Y eso es lo que hace que este objeto sea tan interesante, para uno mismo y para los visitantes: cuestionarse su historia y su finalidad.
«Los productos parecen extraños, pero no como algo negativo», explica Palmisano. «Sino como algo muy interesante. Porque siempre se juega un poco con la duda. ¿Qué es real y qué es falso?»
O hay que preguntarse, ¿qué es en realidad este objeto?
Por ejemplo, la jarra de Nude. Que no lo parece, porque a primera vista carece de abertura para verter. O los dos guijarros de una mesa de exposición puesta en el stand de Kütahya Porselen: si no se descubrieran, al mirarlos más de cerca, las diminutas aberturas, uno no pensaría que se trata de saleros y pimenteros.
O las macetas de Migration of Matter Studio, que asemejan un cúmulo de tierra alrededor de las raíces.
Pero a veces uno se admira. ¿Qué es lo que sucedió con eso?
Por ejemplo, el florero Cuffs de Evg.works, que parece haber sido retorcido con fuerza y dañado por la mano de un superhéroe. O la vajilla de Ceramic Japan, cuyo plato parece una hoja de papel blanco que primero se arrugó y luego se intentó alisar lo mejor posible.
Y a veces simplemente fascinan los efectos ópticos. Por ejemplo, cuando el jarrón acrílico transparente Halo Long de by Vivi brilla con los colores del arco iris.
¿Todo esto suena excéntrico? No, aseguran los expertos del estudio de diseño Bora.Herke.Palmisano, que analizaron las tendencias actuales en mobiliario y artículos de consumo para la Feria de Fráncfort.
«Estos productos son para todo el mundo. Para el uso hogareño normal o para el lifestyle que no es absolutamente inusual ahora», dice Annetta Palmisano.
«Estas cosas se mezclan con el entorno. No son necesariamente las cosas ruidosas y llamativas, sino que simplemente irritan por un momento», agrega.
Y puede que saleros y jarrones se conviertan incluso en tema de conversación para una fiesta o para quien pasó de visita a tomar un café, cuando los invitados tengan que mirar dos veces y pregunten luego por estos objetos.
Por Franziska Gabbert (fotos) y Simone A. Mayer (texto) (dpa)