(dpa) – A veces es mejor utilizar un aparato eléctrico en vez de realizar una tarea de forma manual. Un buen ejemplo de ello es lavar los platos.
Lavarlos a mano es, en parte, mucho más caro que lavarlos en el lavavajillas. Según los expertos, en promedio cuesta el doble, para la misma cantidad de vajilla.
Se puede ahorrar más aún si se usa la máquina a temperatura lo más baja posible y se utiliza además un programa ecológico. De acuerdo con los expertos, con los programas de ahorro de energía se puede reducir hasta un 40 por ciento el consumo de electricidad, en comparación con los programas normales.
Por cierto, no es necesario prelavar la vajilla. Así, además, se ahorra agua. Los restos de comida es mejor eliminarlos con la mano y tirarlos a la basura.