(EP) – La vicealcadesa de Valencia y concejala de Desarrollo y Renovación Urbana, Sandra Gómez, ha insistido, un día después de reunirse con la representante del Valencia CF Layhoon Chan, que es «innegociable» que la propiedad del club «cumpla las obligaciones» que suscribió respecto al polideportivo de Benicalap y el Nou Mestalla, que debe tener una capacidad de 70.000 espectadores, si quiere «mantener sus derechos urbanísticos» una vez caducada la ATE.
Así lo ha defendido Gómez, durante la presentación del Plan de Sostenibilidad Turística, preguntada por el encuentro que mantuvo este lunes con Layhoon Chan, la expresidenta del club y cercana a la propiedad.
Sandra Gómez ha enmarcado este encuentro dentro de la «normalidad institucional» y ha explicado que Chan, «como representante de la empresa», quería «conocer de primera mano el punto jurídico en el que se encuentra» el proyecto para reactivar la construcción del Nou Mestalla y la ATE.
La vicealcaldesa, bajo la «premisa indiscutible» de que la ATE está caducada, ha explicado que en esta reunión trasladó a Chan lo que ha manifestado en «reiteradas ocasiones» en público y privado: que es «absolutamente innegociable» e «imprescindible» que, si el club quiere mantener los derechos y beneficios de las plusvalías urbanísticas de la ATE, debe cumplirse con las obligaciones que se suscribieron en la ATE».
En ese sentido, ha destacado dos aspectos «innegociables». El primero, «un estadio que cumpla con lo que se suscribió en la famosa ATE, de 70.00 espectadores, preparado para acoger cualquier tipo de competición nacional o internacional». En ese punto, ha recordado que la ATE se aprobó en 2015 con Meriton como máximo accionista y Layhoon Chan en su presidencia, por lo que deben ser conocedores de las condiciones.
En segundo lugar ha situado la necesidad de desarrollar un polideportivo municipal en Benicalap «para compensar la enorme pérdida que sufrieron los vecinos del barrio al ceder su gran espacio publico a la propiedad del club».
Gómez ha subrayado que el cumplimiento «innegociable» de estos dos elementos viene marcado por «la ley y todos los compromisos jurídicos suscritos», por lo que «espera» que «todos los responsables públicos tengan la misma línea» de «firmeza» y de «exigir lo que se firmó».
En ese contexto, la vicealcaldesa señala que la «apuesta» del Ayuntamiento es «condicionar los derechos urbanísticos solo a que se invierta en el estadio» y se cumplan estos requisitos. Se trata, ha defendido, de la propuesta «más razonable y la que sinceramente da la mejor solución, no solo para la ciudad, sino para el club».
«Si la propiedad del club hoy o el día de mañana quiere hacer uso de los beneficios y derechos urbanísticos para llegar a lo que suscribimos, puede hacerlo porque tendrá unos derechos condicionados, condicionados a invertir en el estadio, a llegar a los 70.000 espectadores y hacer el polideportivo de Benicapalap. Si hay una propiedad del club que quiere hacer uso de esa capacidad financiera, podrá hacerlo siempre y cuando sea para mejorar le estadio y llegar a los 70.000 espectadores», ha subrayado Sandra Gómez.
La dirigente municipal ha remarcado que «no se puede aceptar cualquier cosa que sea menos» ni «aceptar proyectos que pongan encima de la mesa une estadio que sea más pequeño que el actual Mestalla o del mismo aforo», por qué en ese caso habría que reflexionar «qué hemos estado haciendo en los últimos 20 años si acabamos con un estadio peor que el actual».
«No solo desde el punto de vista jurídico, sino desde el modelo de reflexión de ciudad, nadie puede defender que podamos conformarnos con un estadio de 49.000 espectadores», ha reiterado.
Sandra Gómez ha indicado que la «ciudad hizo un gran esfuerzo» para recalificar el antiguo Mestalla y con los terciarios, para «ayudar a financiar la construcción», y que tiene «un interés de que haya un estadio que esté a la vanguardia» y sea «de primer nivel» para acoger eventos deportivos y de otro interés turístico.
Por ello, «la ciudad de València puede mantener esos compromisos siempre y cuando solo estén condicionados a hacer ese estadio, un estadio de primer nivel, de 70.000 espectadores». «Es un acuerdo que es razonable, es lógico, garantiza el futuro del club, garantiza la posibilidad de financiar el estadio con fondos importantes», ha esgrimido.
Sobre si contempla que no sea Meriton quien acabe el campo, Sandra Gómez ha señalado que «ha llegado un punto» en el que lo que es «irrenunciable» es acabar el estadio, por lo que «se valorarán todas las posibilidades», pero ha mantenido que sigue «pensando que el club está en condiciones de pagarlo» con el dinero de la CVC y otras posibilidades de financiación que puede tener por sus derechos urbanísticos. «Lo lógico es que ellos cumplan con el compromiso que suscribieron con la ciudad en 2015, cuando los propietarios aceptaron y aprobaron la ATE».