(dpa) – Las arvejas, las lentejas y las alubias ya no son un ingrediente muy frecuente solamente en la cocina vegana. A continuación, algunos consejos para preparar correctamente las legumbres y evitar los consabidos efectos secundarios.
Si se busca contrarrestar el efecto flatulento, añadir al plato especias como el anís, el comino o el hinojo, aconsejan desde el Centro Estatal de Nutrición de Baden-Wurtemberg, en Alemania. También resultan adecuadas las hojas de laurel o de curry, la mejorana y el jengibre.
Las especias tienen un efecto óptimo cuando se añaden al comienzo de la cocción. En cambio, la sal debe ser agregada lo más tarde posible, ya que, al igual que el vinagre o el jugo de limón, impide el ablandamiento de las legumbres porque endurece mucho más el hollejo.
Para evitar las flatulencias después de comer, las legumbres deben cocinarse el tiempo suficiente. También es útil dejarlas germinar. Los frutos germinados se escaldan durante dos o tres minutos antes de consumirlos, es decir, se cocinan brevemente en agua hirviendo.
Las legumbres secas no deben consumirse crudas en ningún caso, porque determinadas sustancias incluso pueden ocasionar intoxicaciones.
Cuanto más grande sea la legumbre, más importante resulta el ablandarla antes de cocinarla. En el caso de las lentejas rojas o las amarillas, en cambio, este paso no es necesario.
Para ello, hay que colocar las legumbres en recipientes suficientemente grandes, que deben ser llenados con al menos el doble del volumen de agua. Lo mejor es dejarlas en remojo durante la noche y, en verano, colocarlas en el refrigerador.
Posteriormente, desechar el agua en la que fueron remojadas porque contiene ingredientes flatulentos.