(EP) – El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, ha pedido este jueves en la Cumbre de presidentes de Mercosur una definición «técnica y política» de los países respecto a la flexibilización del bloque para que no sea «un lastre», a lo que el presidente de Argentina, Alberto Fernández, ha respondido que Uruguay «tome otro barco».
Durante su intervención, Lacalle Pou ha afirmado que Uruguay «necesita avanzar» y ha remarcado que el país «necesita y merece» actuar «con libertad». «Obviamente que el Mercosur pesa, obviamente que su producción pesa en el concierto internacional, lo que no debe y no puede ser es que sea un lastre, no estamos dispuestos a que sea un corsé», ha agregado.
A su juicio, el bloque «ha tenido más aciertos que errores», pero ha insistido en que el pueblo uruguayo «nos exige oportunidades de progreso». «Oportunidades de progreso que sean en distintos planos y este Gobierno siente que tiene que responder a ese clamor de sus ciudadanos y responder a ese clamor no significa en ningún momento atentar contra los intereses de otros pueblos», ha añadido.
Lacalle Pou ha pedido «profundizar la zona de libre comercio» porque aún hay «aspectos en la vida cotidiana que siguen de alguna manera complejizando en la zona de libre comercio». De forma paralela, ha mostrado la conformidad de Uruguay en revisar el arancel externo común y ha recordado que se ha reunido con los presidentes de Argentina, Brasil y Paraguay y que, en charlas informales, se han abordado temas similares.
«Tenemos que avanzar en las conversaciones con otros bloques, nosotros no estamos conformes», ha señalado, reiterando que «es el momento para avanzar juntos», ha informado el diario uruguayo ‘El País’. En este sentido, ha hecho referencia al bloque europeo, del que ha dicho que hay «una dificultad que se ha trabajado durante muchísimos años» y que tiene «camino por recorrer».
Fernández, por su parte, ha respondido al presidente de Uruguay en su intervención final, aunque no le ha nombrado. «La verdad es que no queríamos ser una carga para nadie, porque además una carga es algo que hace que a uno lo tiren de un barco, y lo más fácil es bajarse del barco si es que esa carga pesa mucho», ha aseverado.
«Así que en lo que hago hincapié es en que terminemos con esas ideas que ayudan tan poco a la unidad en un momento donde la unidad tanto nos importa, ¿ok?», ha añadido, subrayando que el objetivo es que todos los países se sintieran «hermanos». «Si nos hemos convertido en otra cosa, en una carga, lo lamento», ha continuado.
«Si somos un lastre que tomen otro barco, pero lastre no somos de nadie», ha insistido, antes de recalcar que, para él, es un «honor» formar parte de Mercosur. «Es un honor estar trabajando junto a ustedes, tengo la misma esperanza que tuvieron los fundadores de Mercosur en poder avanzar y trabajar conjuntamente», ha remachado.
REUNIÓN TENSA
La Cumbre de Mercosur, celebrada para conmemorar el 30 aniversario del bloque y en la que las diferencias entre los países que lo conforman han vuelto a quedar patentes, ha sido calificada como «tensa» por la prensa local. Los presidentes de Brasil y Paraguay, Jair Bolsonaro y Mario Abdo Benítez, respectivamente, han secundado al planteamiento de Lacalle Pou de «flexibilizar» la dinámica del bloque para lograr una mayor integración global, algo que Fernández no ha planteado en su intervención de apertura.
Bolsonaro, que también ha defendido la revisión del arancel externo común y la reducción de las barreras comerciales internas, ha solicitado cambios en el procedimiento de toma de decisiones, señalando que la norma «no puede ser un instrumento de veto o freno permanente» para las decisiones del bloque.
En este contexto, Fernández ha sostenido que la propuesta en materia de revisión del arancel externo común se basa en «preservar el equilibrio entre los sectores agroindustriales e industrial, corregir las actuales inconsistencias para lograr un mayor estímulo a la agregación de valor, tomando en cuenta las negociaciones con terceros», ha recogido el diario argentino ‘La Nación’.
El presidente argentino también ha propuesto la creación de tres observatorios: de la calidad de la democracia, para la prevención de la violencia de género y uno más del medioambiente. «Les propongo un esfuerzo común en la protección de la democracia», ha añadido.
En la reunión, además de Bolsonaro, Benítez, Fernández y Pou, también participan el presidente de Chile, Sebastián Piñera, y el de Bolivia, Luis Arce, como estados asociados. Mercosur celebra su treintena sumido en una profunda crisis por las diferencias ideológicas y pragmáticas entre miembros del bloque, que tienen a la organización instalada en el bloqueo.
El acuerdo comercial con la Unión Europea –anunciado en 2019–, el ingreso de Bolivia como miembro de pleno derecho de la organización o la mayor apertura de las fronteras son algunos de los puntos de fricción entre los estados miembros.