(dpa) – La localidad checa de Most cuenta con un lago artificial creado en una mina a cielo abierto que había sido abandonada. Ahora se ha abierto al público todo el perímetro costero del nuevo lago, según la compañía estatal de revitalización PKU.
Most se encuentra a unos 60 kilómetros al sur de la ciudad alemana de Dresde y a unos cien al norte de Praga.
El lago se puede recorrer a pie o en bicicleta. También se puede nadar y bucear. Cubrir la antigua mina a cielo abierto de Lezaky con agua del río Eger ha demorado unos doce años.