Berlín, 3 ago (dpa) – El Gobierno alemán criticó hoy duramente el incumplimiento de las normas de higiene durante la multitudinaria manifestación del fin de semana en Berlín contra las restricciones impuestas para evitar más contagios en la pandemia de coronavirus.
«Las imágenes que vimos allí el fin de semana son inaceptables», indicó la portavoz adjunta del Gobierno, Ulrike Demmer, y agregó que «el comportamiento de muchos manifestantes no se justifica de ninguna manera y abusa de un bien preciado como lo es la libertad de manifestación».
Demmer observó que no solo se han producido «graves violaciones de las normas de higiene», sino que, según informaciones actuales que maneja, también se hicieron «declaraciones despreciativas contra la dignidad humana» y se obstaculizó la labor de los periodistas.
Indicó también que muchos deberían preguntarse sobre el verdadero significado de participar en una manifestación junto a personas que defienden ideologías de derecha y teorías conspirativas.
«Más allá de esto, por supuesto es un tema el de exponerse al peligro a sí mismo. Pero no es aceptable que los manifestantes no sean conscientes de su responsabilidad hacia los demás, posiblemente miembros más débiles de la sociedad, o que conscientemente los ignoren y arriesguen su salud y sus vidas», apuntó.
En Berlín, el sábado adhirieron hasta 17.000 personas, según los informes de la Policía, a una marcha para manifestar contra las restricciones impuestas por la pandemia y exigieron su abolición. Una manifestación posterior concentró a unas 20.000 personas.
Demmer también subrayó: «Las manifestaciones pacíficas son, por supuesto, importantes, incluso en estos tiempos tan difíciles, para poder presentar públicamente las opiniones. La crítica siempre debe ser posible en una democracia».
Steve Alter, portavoz del Ministerio germano del Interior, apuntó que las decisiones sobre las condiciones marco para la realización de manifestaciones suelen ser adoptadas por las autoridades locales.
Agregó que la protección contra la propagación del virus también desempeña un papel en este contexto y que es difícil prever de antemano si se cumplirán las condiciones.
Según el funcionario de Interior, la Policía federal estaba presente en Berlín durante el fin de semana, pero no para apoyar a las fuerzas del orden berlinesas, sino como parte de sus tareas normales de control en estaciones de tren y en la supervisión de ingresos y salidas de manifestantes del mitín.