Berlín, 21 jun (dpa) – El soldado del Mando de Fuerzas Especiales (KSK) del Ejército alemán (Bundeswehr), cuya cercanía con el islamismo se conoció recientemente, se radicalizó después de una misión en Malí, África Occidental, según informa hoy el periódico «Welt am Sonntag».
El soldado, que cumplió la misión en el país africano antes de incorporarse a la unidad de élite KSK, llamó la atención por calificar a otros miembros de la fuerza de «creyentes» o «incrédulos».
Según informes de dpa, el año pasado el Servicio de Contrainteligencia Militar (MAD) ya lo había incluido por sus dichos en la categoría «roja» como extremista. Tras un procedimiento disciplinario judicial el soldado fue despedido del Ejército a principios de 2020.
El mando de las Fuerzas Especiales, que está estacionado en Calw, en el estado federado de Baden-Württemberg, está integrado por unos 1.400 soldados y fuerzas de apoyo. En los últimos años, el KSK ha sido repetidamente noticia por incidentes de extrema derecha dentro de la fuerza.