El Gobierno de Asturias ha finalizado la ronda de contactos para informar sobre el proceso de trasvase de los beneficiarios del salario social básico (SSB) hacia el ingreso mínimo vital (IMV), tras la reunión que ha mantenido la consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, con los portavoces de la Comisión de Derechos Sociales de la Junta General.
Previamente, se reunió con la Federación Asturiana de Concejos (FACC), los ayuntamientos de Oviedo, Gijón, Avilés; la Federación Asturiana de Empresarios, los sindicatos y las entidades sin ánimo lucro, con el fin de explicar todas las dudas que puede generar el proceso de transición de la prestación autonómica a la nacional.
Para minimizar la carga burocrática, el Ministerio de Inclusión ha aceptado la propuesta del Principado, que permitirá que las personas que reciben el salario social pasen a cobrar el ingreso mínimo sin necesidad de presentar una solicitud, sino únicamente prestando su consentimiento para que sea la propia consejería la que realice los trámites. En esta ronda de contactos, la consejera ha solicitado la colaboración de los ayuntamientos y las entidades del tercer sector para poder llevar a cabo este proceso.
Actualmente 22.338 personas perciben el SSB en Asturias, la principal herramienta contra la exclusión social en la comunidad. Esta cobertura funciona en el Principado desde 2005. “Para la sociedad asturiana, el ingreso mínimo vital no supone ninguna novedad, somos la primera comunidad del régimen general en cobertura a las personas en situación de vulnerabilidad, a las que queremos lanzar un mensaje de tranquilidad, ya que seguirán cobrando el salario social hasta que se incorporen al ingreso mínimo”, ha explicado Álvarez.
Además, ha recordado que la prestación autonómica convivirá con el ingreso mínimo. “Somos conscientes de que hay casos que seguirán bajo la protección del salario social”, ha agregado.