GIJÓN/OVIEDO, 25 Sep. (EUROPA PRESS) La Policía Nacional ha detenido este jueves en su vivienda de Candás a un segundo implicado en la muerte a puñaladas de Andrés V.B., de 51 años, en un piso en el barrio gijonés de Nuevos Roces. Los agentes barajan que este nuevo detenido, también con antecedentes como el primero, podría haber sido colaborador del principal sospechoso de cometer el crimen, aunque no tuvo participación en el mismo.
Así lo ha explicado este jueves el comisario jefe del Cuerpo Nacional de Policía de Gijón, Dámaso Colunga, a los periodistas en las dependencias policiales antes del inicio de la visita de la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón (Foro), y del concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Rafael Felgueroso, a la Comisaría gijonesa.
Colunga ha informado de que la Policía lo detuvo sobre las 11.00 horas y que pudo haber ayudado al principal sospechoso a desprenderse del arma y de algunos efectos, como ropas manchadas de sangre. Los investigadores no descartan que el cuchillo con el que se ha cometido el crimen haya sido arrojado al mar. «Es difícil que se encuentre», ha apuntado.
La víctima recibió más de 20 puñaladas, la mayor parte de ellas en el pecho, y el detenido por el crimen, de 36 años, fue arrestado ayer, miércoles, en el barrio de La Calzada de Gijón junto a su mujer. El matrimonio fue detenido poco después de que saliera de su casa y cogiera el coche, por miedo a que pensaran abandonar la ciudad. La mujer, no obstante, fue esa misma noche puesta en libertad al comprobarse que no guarda relación con el crimen, mientras que él quedó en dependencias policiales al tener pruebas «suficientes» contra el sospechoso.
UN ASUNTO DE DROGAS
Según Colunga, la principal línea de investigación se centra en que el móvil del crimen está relacionada con un asunto de drogas. De hecho, los tres se dedicaban al tráfico de estupefacientes y se conocían del mundo del trapicheo de drogas, «de no mucha cantidad», según el Comisario, quien si bien ha confirmado la vinculación entre agresor y víctima, no ha podido corroborar que grado de relación guardaban, si es que la había, el segundo detenido y el fallecido.
Asimismo, ha indicado que en el registro practicado en el vehículo del principal sospechoso se le intervino 65 gramos de heroína, una cantidad que el comisario ha considerado «importante», al tiempo que ha augurado que posiblemente se pueda incautar más en los registros que quedan por practicar. A este respecto, ha indicado que tanto la víctima como los detenidos también eran consumidores de droga, e incluso el principal sospechoso había estado en prisión.
Y aunque la investigación sigue su curso, ha señalado que no creen que vaya a haber más detenciones. También ha señalado que esperan poder pasar a disposición judicial a los dos detenidos este próximo sábado.
HALLADO MUERTO
Los hechos se remontan al pasado lunes por la noche, cuando fue localizado el cadáver de un hombre en su piso de Gijón, en el barrio de Nuevo Roces. El sospechoso pudo ser identificado gracias a la colaboración ciudadana.
De hecho, fueron personas de su entorno quienes llamaron a la Comisaría, sobre las 22.00 horas del pasado día 22, para alertar de que temían que al hombre, que vivía solo, le hubiera pasado algo al no poder contactar con él. Una vez que los agentes llegaron al lugar y tras comprobar que nadie respondía a la puerta, llamaron a los Bomberos, quienes lograron acceder a la vivienda a través de una ventana que estaba abierta.
Ya en el interior, se encontraron con el cadáver del hombre en el suelo en un charco de sangre y con varias puñaladas en la zona pectoral, lo que hace sospechar que la víctima podía conocer a su agresor o agresores. Según fuentes policiales, el hombre contaba con 14 detenciones anteriores por robos con fuerza y delitos contra la salud pública. Los arrestos, de hecho, fueron precisamente por tráfico de drogas.