(dpa) – ¿Duerme lo suficiente mi hijo? Esta pregunta atormenta a muchos padres cuando su hijo de un año se despierta de repente por las noches y se comporta como si fuera pleno día.
Sin embargo, los pediatras coinciden: no hay que preocuparse por este tipo de comportamiento. Por lo general, los niños duermen la cantidad de horas que necesitan.
Estos periodos de intraquilidad nocturna pueden tener distintas causas, como hambre, sed, rutinas poco beneficiosas a la hora de dormirse o dolor de dientes. A veces pueden deberse también a etapas de crecimiento o incluso infecciones. Y otras, el niño está simplemente elaborando vivencias que tuvo durante el día.
Tener una rutina diaria estructurada y un ritual para irse a dormir a la noche ayudan a crear un hábito. Eventualmente, también mejora el sueño por las noches si el niño duerme menos siesta o se pospone la hora de ir a la cama.