En las conversaciones que se producen en la industria de las nuevas tecnologías, Bitcoin y el mundo de las criptomonedas cada vez son más protagonistas. Muchos de los críticos de Bitcoin hablan de que han producido un terreno perfecto para la especulación y que corre el peligro de provocar que muchas cuentas bancarias sufran las consecuencias en cualquier momento.
Por el contrario, los que confían en las bondades de Bitcoin, hablan de que las criptomonedas es un avance similar al que supuso Internet. Para ellos todavía queda tiempo para que alcance su máximo potencial.
En este sentido, acostumbran a comparar la caída de los precios de bitcoin del pasado año con el famoso estallido de la burbuja dotcom y creen que solo es un retroceso temporal que dará paso a un gran florecimiento del sector de las criptomonedas.
Un futuro incierto
Cuando se habla con analistas de criptomonedas, lo cierto es que muchos comentan que la realidad se aproxima a un punto de vista más equilibrado, ni Bitcoin es un fracaso ni supondrá un milagro en el terreno de la economía.
Tendremos que esperar todavía unos años para ver claramente qué sitio ocupará esta tecnología en nuestro mundo, donde de momento solo podemos asistir ante lo cambiante de los precios, entender quien lo usa y la forma en la que lo hace.
¿Cuál es el uso actual de las criptomonedas?
Los partidarios de las criptomonedas defienden que cuenta con muchas ventajas frente a los métodos de pago tradicionales, pero para los que son contrarios, aseguran que quien paga con bitcoin pasa a ser un especulador, dependiendo su valor de la volatilidad de las fichas hasta que se produce el pago.
Todo esto hace que sea entendible el preguntarse si este tipo de tecnología se va a usar en otras actividades que no sean las especulativas. Los que están a favor de las criptomonedas dicen que en muchos países la moneda llega a contar con una mayor volatilidad que el bitcoin.
El problema más importante al que se enfrenta el bitcoin es el uso práctico y legal al ser utilizado en muchas ocasiones para actividades fuera de la legalidad.
Una mirada al futuro
Por el momento, hablamos de una tecnología que no se utiliza de forma generalizada entre la gente de a pie, pero en el futuro sí que podría utilizarse. Existen todavía muchas áreas donde los empresarios con ingenio creen que las criptomonedas pueden ser de mucha utilidad.
En el Ranking de criptomonedas algunas de las más populares han pasado a ser Ethereum y EOS, que son otras redes de criptomonedas que se pueden programar para otras aplicaciones de mayor sofisticación como las que posibilita el software de Bitcoin, caso de los contratos en el terreno financiero.
Ya hay muchos programadores que han optado por el desarrollo de aplicaciones de carácter descentralizado, también llamadas Dapps, que usan fichas de Ethereum y EOs. Una buena parte de ellas ya se usan actualmente. Con ellas se puede mover dinero y registrar la propiedad de bienes digitales, como artículos para videojuegos sin que una empresa central tenga que llevar su registro.
Muchas de estas Dapps, por desgracia, están en zonas donde se bordea la legalidad como el sector de las apuestas. Uno de los usos principales de Ethereum también ha sido por parte de empresas que querían hacer recaudaciones de fondos sin querer cumplir con las normas que se aplican a los valores para las ofertas iniciales de moneda, involucrándose en actividades al margen de la ley.
Todavía no hay demasiadas señales de uso de criptomonedas legítimos que se hayan desarrollado fácilmente fuera del círculo en el que se mueven sus defensores.
Eso sí, no cabe duda de que uno de los aspectos más positivos es que los que realmente están interesados en ellas quieren solucionar los fallos. La volatilidad del valor de las monedas digitales ha tenido un efecto incentivador para los que trabajan en sus mejoras.
En el sector recientemente entró Facebook como empresa más importante, y los rumores son que está trabajando para tener sus propias fichas digitales, así como otras empresas de mensajería de gran volumen. El futuro de las criptomonedas es impredecible, por lo que conviene no descartar su uso generalizado el día de mañana.