Dicen que Andalucía tiene un color especial, pero poco se habla de que, a la hora de hablar de sabores, tiene también muchos especiales. La comunidad autónoma andaluza se caracteriza por su clima, por su estilo de vida y, sobre todo, por su gastronomía. Son muchas las firmas andaluzas que dejan su huella en el sector de la alimentación con productos de todo tipo, en los que siempre prima la calidad.
Ahí es donde entra en juego Peñagallo, una compañía ubicada en Granada que se centra en la elaboración de patatas fritas artesanales y que, tras muchos años marcando un nuevo camino en el mercado, ahora ha decidido dar el salto al mercado gourmet en el seno del 33 Salón Gourmets. La famosa Feria Internacional de Alimentación y Bebidas de calidad, una de las más reputadas y prestigiosas de todo el panorama, se ha convertido en el marco para el anuncio de la nueva línea de productos de esta empresa.
Para adentrarse en este nuevo tipo de público, la apreciada firma granadina lo hace a través de dos productos completamente nuevos. Por una parte, ha anunciado unas patatas con trufas negras y, por otra, unas con flor de sal de salinas del Parque Natural de Cabo de Gata. Ambas gozan de un sabor especial gracias a la materia prima de la región, recurriendo a los ingredientes más naturales y sabrosos de la comunidad andaluza.
Para recoger las flores de sal, Peñagallo cuenta con la ayuda de profesionales del Cabo de Gata, un equipo que se encarga de realizar la recogida de forma totalmente cuidadosa para que la sal no se estropee y, una vez recolectada, se prepara dejándola secar al sol durante un periodo de más de 12 meses. De esta forma, conserva todo el sabor del mar, ideal para dar ese sabor tan especial para las patatas.
En cuanto a las patatas con trufas negras, su sabor proviene, por supuesto, de dichas trufas, aunque el toque diferencial también lo ponen las patatas. Escogidas de manera selecta en la vega de Granada, justo a los pies de la imponente Sierra Nevada, y fritas de forma artesanal, con un aceite de oliva virgen extra propio de la tierra, consiguen ese aroma, textura y gusto tan característicos gracias al toque extra que aportan las trufas.
Con el fin de diferenciar a estos nuevos productos gourmet, las nuevas bolsas de patatas de Peñagallo cuentan con un packaging que consigue un aspecto bastante distintivo. Cenefas inspiradas en la milenaria Alhambra de Granada rematan el frontal con un contraste entre rojo y blanco para las patatas con flor de sal marina, reflejando el color de la propia sal; como también entre diferentes tonos de negro para reforzar la presencia de la trufa.
Para dar a conocer esta nueva línea, la compañía se encuentra disponible en el 33 Salón Gourmets, dentro del pabellón 10 de IFEMA, durante los días 8, 9, 10 y 11 de abril. Los asistentes tienen, y tendrán, la ocasión de saborear estas nuevas patatas que se abren camino entre los paladares más refinados para apuntar directamente al público más exquisito a través de la nueva línea Peñagallo Gourmet.
Peñagallo, el mejor sabor granadino
Desde su fundación en el año 1988, Peñagallo ha sabido ganarse un hueco a través de la calidad y la confianza entre la población granadina gracias a unos productos pensados para todos los públicos y gustos. Las mejores materias primas, escogidas cuidadosamente y con ingredientes 100% naturales, son tratadas por las mejores manos para conseguir un producto totalmente diferente, a la par que familiar.
Dedicados a la producción de aperitivos salados, su especialización en las patatas fritas es la que más ha logrado calar entre el público. Esta empresa, que se ubica en el Valle del Lecrín, en la población de Dúrcal (Granada), sabe lo importante que es recurrir a los productos locales para aprovechar las ventajas de la limpieza de la vega granadina. Así, todas sus propuestas logran destacar por la potencia de su sabor.