El Gobierno de Asturias ha acreditado el jueves a los primeros embajadores de la candidatura de la cultura sidrera asturiana a patrimonio inmaterial de la humanidad de la UNESCO. Son un total de 134 personas y entidades que se encargarán de recabar adhesiones a la iniciativa y que representan a los ayuntamientos asturianos, así como a numerosos sectores de todos los ámbitos de la sociedad.
Entre las labores de los embajadores, que fueron acreditados durante un acto celebrado esta tarde en el Llagar Trabanco, en Sariego, figuran la gestión del libro de firmas de apoyo, que en pocos días ha sumado miles de rúbricas, en distintos puntos del territorio y en la web www.culturasidrera.com. También se encargarán de la coordinación con asociaciones o entidades para la recogida de apoyos, de la distribución de distintivos en establecimientos hosteleros y comercios y de la difusión de materiales informativos y promocionales. La lista completa de acreditados figura en la web.
La consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, ha manifestado que “hoy es un día importante para la cultura sidrera porque ponemos en marcha una maquinaria formidable de apoyo para llevar a buen puerto a esta candidatura”. El proyecto, según ha advertido, “es un reto complicado, pero los asturianos nunca hemos tenido las cosas fáciles y vamos a trabajar sin desmayo para llevar la propuesta a la Comisión de Patrimonio Nacional y, tras pasar este corte, llegaremos a la Unesco”.
La responsable de la consejería ha subrayado que Asturias “es la única región que ha conseguido mantener la cultura sidrera de generación en generación, conservando lo mejor de la tradición y conjugándola con la innovación”.
En este sentido, ha destacado la labor del sector de la sidra “cada día más profesional, que defiende muy bien el producto en un mercado global”.
Durante el acto, la consejera ha agradecido a los embajadores “su disposición a trabajar en favor de la cultura sidrera, un ilusionante reto y proyecto en el que queremos integrar a todos los asturianos y asturianas, independientemente del lugar donde residan”. Álvarez ha alabado, asimismo, la actitud de los centros asturianos de todo el mundo, “que hoy no están aquí, pero han sido los primeros en sumarse a la iniciativa, convirtiéndose en los primeros embajadores”.
Álvarez ha destacado la labor de los medios de comunicación “que desde el minuto cero se han comprometido a contribuir, promover y difundir la cultura sidrera, siendo especialmente importante su apoyo porque desempeñan una labor imprescindible e insustituible”.
La consejera ha indicado que esta red de embajadores “será mucho más extensa, ya que todos los interesados en difundir el proyecto para obtener respaldos podrán ir incorporándose en las próximas semanas”.
El Gobierno de Asturias, con el apoyo y la colaboración de científicos y expertos, lleva meses trabajando en la elaboración de la documentación que requiere la Unesco para formalizar la candidatura. “Nos hemos centrado en construir el relato de una tradición que es seña identidad del ser asturiano; ese gesto inconfundible, ese ritual del escanciado como parte intrínseca de una socialización que invita a compartir, a celebrar, a ser solidarios y a estrechar lazos de amistad”, ha dicho la consejera.
También ha manifestado que la sociedad debe ser la gran protagonista de esta iniciativa, dado que la candidatura “encierra un mensaje colectivo y expresa la voluntad del pueblo, que quiere que se conozcan y reconozcan los vínculos de amistad universal y de fraternidad que encierra la bebida más emblemática de Asturias”, con el escanciado “como seña de identidad única, diferenciadora e irrepetible”.