Bruselas, 28 nov (dpa) – La Comisión Europea presentó hoy un plan para que Europa abandone de aquí hasta 2050 el petróleo, el gas y el carbón y se convierta en «la primera gran economía en alcanzar las emisiones cero», anunció en Bruselas el comisario para el Cambio Climático, el español Miguel Arias Cañete.
El anuncio se produce días antes de la conferencia COP24 sobre clima que comienza el próximo domingo en la localidad polaca de Katowice, donde los países tienen que negociar las normas y la forma de financiación para poner en marcha el Acuerdo de París de 2015.
El documento de la Comisión pide al bloque ir más allá de las metas fijadas hasta ahora si desea alcanzar los objetivos de París, es decir que el aumento de la temperatura global no supere los 1,5 o dos grados centígrados respecto de los niveles preindustriales.
En vez de reducir las emisiones en un 40 por ciento hasta 2030 en comparación con 1990, la UE debería recortarlas en un 45 por ciento como parte de la estrategia a largo plazo para alcanzar la llamada neutralidad en carbono, es decir, las emisiones cero, señala el documento.
La estrategia implica el abandono de los combustibles fósiles en la economía, en el abastecimiento energético y en el transporte para dentro de 30 años. También tienen que cerrarse otras fuentes de emisiones de gases dañinos para el medio ambiente y reducir los niveles de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera, por ejemplo mediante la reforestación de los bosques.
«Podemos lograrlo, y si tenemos éxito, otros nos seguirán», afirmó Arias Cañete.
Los objetivos fijados en París se ven amenazados por recientes informes sobre el aumento de las emisiones de CO2 pero también por la decisión de Estados Unidos de retirarse del Acuerdo de París, tomada por el Gobierno de Donald Trump.
Conseguir una economía con neutralidad de carbono hasta 2050 requiere inversiones extras por valor de hasta 290.000 millones de euros al año (unos 327.000 millones de dólares), de acuerdo con la Comisión.
Arias Cañete destacó, sin embargo, también los beneficios económicos: al ser más sano el aire que se respira, los gastos sanitarios podrían bajar en torno a unos 200.000 millones de euros por año. También se podrían reducir en más de un 70 por ciento las importaciones de energía, que hoy cuestan 266.000 millones de euros.
Los objetivos propuestos por la Comisión no son nuevos, ya que en 2009 ya había promovido una reducción de los gases de efecto invernadero de un 80 a un 95 por ciento hasta 2050 respecto de los valores de 1990. El plan actual de la «neutralidad en carbono» vendría a equivaler a la meta del 95 por ciento, opinan los grupos ecologistas. El cinco por ciento restante son las llamadas emisiones negativas que se generan por la captura de gases de efecto invernadero de la atmósfera.
El martes, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) publicó un informe según el cual para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París es necesario que los países como mínimo tripliquen sus esfuerzos en la lucha contra el cambio climático.
Según el PNUMA, todavía es posible teóricamente que se cumpla el objetivo de limitar el calentamiento global de aquí al año 2100 a una media de dos grados centígrados. Sin embargo, si los países mantienen sus políticas medioambientales actuales, la temperatura global aumentará en alrededor de 3,2 grados en comparación con la era preindustrial, con efectos catastróficos para el medio ambiente.