Singapur, 23 oct (dpa) – La alemana Angelique Kerber, máxima favorita al título, debutó ayer con una inesperada derrota ante la holandesa Kiki Bertens en el WTA Finals de tenis de Singapur, donde la estadounidense Sloane Stephens superó a la japonesa Naomi Osaka.
En su primer partido tras romper con su entrenador Wim Fissette, con el que conquistó este año el torneo de Wimbledon, Kerber sufrió una dolorosa derrota por 1-6, 6-3 y 6-4 ante Bertens, que se clasificó en el último momento al certamen por la baja de la rumana Simona Halep, número uno del mundo.
Un cómodo primer set y un quiebre en el inicio del segundo parcial auguraban un sencillo triunfo para Kerber, pero Bertens produjo una gran remontada para quedarse con la victoria que la coloca en la cima del Grupo Rojo.
«Estoy muy feliz de haber logrado la victoria», destacó Bertens tras su triunfo. «Tuve un comienzo lento, pero estoy muy feliz de haber dado vuelta este partido. Conversé un poco con mi entrenador cuando no me iba tan bien, así que decidimos buscar un poco más mis tiros, jugar un poco más agresiva y funcionó», expresó la octava favorita.
«Definitivamente, éste no fue el principio que me había imaginado», reconoció Kerber, primera preclasificada. «En el tercer set tuve muchas oportunidades, pero no las aproveché. Ahora tengo dos ocasiones más. Tengo que jugar como en el primer set y hacerlo a lo largo de los dos sets. Tengo que ser más consistente», afirmó la campeona de tres Grand Slam.
Un rato antes, en el duelo entre las últimas dos campeonas del Abierto de Estados Unidos, Sloane Stephens se impuso por 7-5, 4-6 y 6-1 a Naomi Osaka, en un partido muy irregular, en el que ambas jugadoras se combinaron para cometer 78 errores no forzados.
En ese contexto, la campeona del US Open 2017 prevaleció tras dos horas y 24 minutos, cuando la japonesa, tercera cabeza de serie, ya había bajado definitivamente su rendimiento.
«Naomi es una jugadora muy segura, por lo que es muy bueno ganarla después de un partido muy competitivo», destacó Stephens. «Nunca me rendí y sabía que iba a tener que jugar un muy buen tenis para vencerla», añadió la estadounidense, quinta favorita.
Las victorias de Bertens y Stephens, sumadas a las que el domingo habían logrado la checa Karolina Pliskova, séptima preclasificada, y la ucraniana Elina Svitolina, sexta sembrada, determinaron que por primera vez en la historia del WTA Finals las cuatro jugadoras con peor preclasificación vencieran a las cuatro máximas favoritas en la la primera fecha de ambos grupos.
Para mañana están previstos los duelos del Grupo Blanco entre la danesa Caroline Wozniacki y la checa Petra Kvitova y luego jugarán Pliskova ante Svitolina.
El WTA Finals es el último torneo del circuito femenino de la temporada y reúne a las ocho mejores raquetas del curso. Tras una fase de grupos en la que cada tenista disputará tres partidos, las dos mejores de cada grupo avanzarán a semifinales.
El WTA Finals se disputa en Singapur desde 2014 y el torneo se juega sobre cancha dura. La edición de 2018, que acabará el domingo, repartirá cerca de seis millones de dólares en premios.