Santiago de Chile, 5 oct (dpa) – El presidente de Chile, Sebastián Piñera, aseguró hoy que el plebiscito de 1988 “representó un gran triunfo para la democracia y los demócratas”, en un acto en La Moneda para conmemorar el 30° aniversario de la consulta, en la que los chilenos rechazaron ocho años más de Gobierno de Pinochet.
“El 5 de octubre de 1988 fue un día luminoso y esperanzador para nuestra democracia. Después de largos 16 años de régimen militar, ese miércoles 5 de octubre representó un gran triunfo para nuestra democracia y abrió las puertas hacia una transición ejemplar que nos permitió recuperar nuestras libertades, amistad cívica y respeto por los derechos humanos», dijo Piñera.
Se trató de un sobrio acto convocado por el Gobierno, donde se recordó el triunfo de la opción “No” por el 54 por ciento de los votantes en el plebiscito de ese año. Eso considerando que, si bien Piñera votó por el “No”, dos de los principales partidos de la coalición de Gobierno apoyaron el “Sí”. Incluso la directiva de uno de ellos, la Unión Demócrata Independiente (UDI), decidió no asistir a La Moneda.
Después de meses de una agria polémica sobre los derechos humanos y el Museo de la Memoria, que incluso le costó el cargo al ministro de Cultura apenas cuatro días después de haber sido nombrado, Piñera aseguró en su discurso que el “contexto” no justifica las violaciones de los derechos humanos ocurridas durante la dictadura (1973-1990).
«Quiero reafirmarlo una vez más y en forma fuerte y clara: ningún contexto justifica ni justificará jamás los atropellos a los derechos humanos, los que deben ser sagradamente protegidos y respetados en todo tiempo, lugar y circunstancia», sostuvo.
El mandatario afirmó: «El Gobierno militar restringió severamente nuestras libertades y cometió graves violaciones a los derechos humanos». Pero aseguró que eso no significa que no se pueda analizar cómo se llegó al golpe de Estado de 1973. “Los países necesitan memoria para no olvidar, pero también historia para aprender», dijo.
El 5 de octubre de 1988, tal como estaba establecido en la Constitución, escrita por la dictadura, se llevó a cabo un plebiscito donde los chilenos debían aprobar o rechazar al candidato propuesto por los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas y de Carabineros: el general Augusto Pinochet, quien ya llevaba 15 años en el poder.
El triunfo del “No” posibilitó la convocatoria de elecciones libre en diciembre de 1989, las cuales fueron ganadas por el candidato de la oposición, el demócrata cristiano Patricio Aylwin. Cuando Aylwin asumió el Gobierno, en marzo de 1990, se inició la transición a la democracia, Pinochet dejó el poder, pero se mantuvo como comandante en jefe del Ejército hasta 1998.
Cerca de un centenar de organizaciones convocó un acto masivo para esta tarde en el centro de Santiago para celebrar los 30 años desde el triunfo del “No”.