Buenos Aires, 1 oct (dpa) – El peso argentino frenó hoy su devaluación y cerró en alza frente al dólar en el debut de la nueva política cambiaria del Gobierno argentino, que establece bandas de flotación y cero crecimiento de la masa monetaria nominal hasta junio para controlar la inflación.
La cotización del dólar cerró en 40,50 pesos, un 3,8 por ciento menos que el viernes, cuando alcanzó un nuevo récord histórico, según los valores del Banco Nación, la principal entidad financiera estatal.
La nueva política cambiaria que implementa desde hoy el Banco Central de la República Argentina (BCRA) prevé un esquema de flotación de la moneda estadounidense entre bandas que va de 34 pesos a 44 pesos, que se ajustará diariamente a una tasa de 3 por ciento mensual hasta fin de año y se la recalibrará al comienzo del año próximo.
El jefe del BCRA, Guido Sandleris, auguró que en «un par de semanas» logrará controlar el tipo de cambio entre el peso y el dólar, que en lo que va el año aumentó casi un 120 por ciento.
«Siempre que se pone en marcha un esquema (monetario) nuevo, hay un período de transición y adaptación del mercado hasta que se acomoda a las nuevas reglas y señales que va dando el Central», comentó Sandleris, que lleva apenas cinco días en el cargo, que asumió tras la renuncia de Luis Caputo.
Las medidas del Central cumplen una exigencia planteada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) a Argentina en el nuevo acuerdo financiero al que llegaron la semana pasada.
A cambio de diferentes condiciones económicas, entre ellas equilibrar las cuentas fiscales en 2019 y reducir la inflación, el Gobierno argentino consiguió un aumento de 7.100 millones de dólares en el crédito a tres años de 50.000 millones de dólares que había firmado en junio último con el FMI.
Según diversas estimaciones de consultoras privadas, la inflación superaría este año el 40 por ciento.