Lima, 11 ago (dpa) – Trece países miembros del Grupo de Lima, que le hace seguimiento a la crisis política en Venezuela, le formularon hoy un «exhorto urgente» al Gobierno de ese país para que realice una investigación «independiente, exhaustiva y transparente» sobre el supuesto atentado contra el presidente Nicolás Maduro.
En un comunicado publicado por la Cancillería del Perú, el Grupo «repudia» además la posible «manipulación política» del asunto y «condena y rechaza firmemente» los presuntos abusos contra los diputados Julio Borges y Juan Carlos Requesens, a quienes Maduro culpa del caso.
Según el comunicado suscrito por Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, Costa Rica, Chile, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay y el Perú, la investigación debe hacerse «de manera imparcial (y) con pleno respeto del estado de derecho y de los derechos humanos».
En ese marco, el Grupo señala que la detención «arbitraria, ilegal y sin investigación previa» de Requesens y la orden de captura emitida contra Borges «en abierta violación a sus fueros parlamentarios y a las garantías e inmunidades» que le dan la Constitución venezolana y los tratados internacionales, son una «violación del debido proceso penal».
Hace una semana, durante actos por el aniversario de la Guardia Nacional Bolivarianas, drones con explosivos atacaron supuestamente a Maduro y a quienes lo acompañaban en la tribuna de honor.
Según las autoridades venezolanas, las pesquisas apuntan como responsables a Borges, influyente opositor que está fuera del país, y a Requesens, un líder juvenil que fue apresado y que según su familia es sometido a torturas.
En el comunicado, los 13 países expresan «profunda inquietud por la utilización de instituciones de seguridad y procuración de Justicia del Estado venezolano para perseguir a opositores, lo que evidencia una vez más la ruptura del orden democrático y el quebrantamiento de la Constitución».
Además, «reiteran su profunda preocupación por la situación de todos los presos políticos en Venezuela y exigen su inmediata liberación, haciendo un urgente llamado para que se respeten las garantías y libertades políticas de todos los venezolanos, así como la convocatoria de elecciones libres, transparentes y democráticas».
«Los gobiernos (firmantes), al reiterar que sólo los venezolanos pueden encontrar la solución para la grave crisis, reafirman su compromiso de seguir tomando acciones e iniciativas dirigidas a contribuir a la restauración de la institucionalidad democrática», señala el texto.
El Grupo de Lima se creó el 8 de agosto de 2017 a partir de una declaración firmada en la capital del Perú por países críticos con el Gobierno de Maduro con el objetivo de «explorar formas de contribuir a la restauración de la democracia en ese país a través de una salida pacífica y negociada».