Buenos Aires, 26 jul (dpa) – Una multitud se congregó hoy en la Plaza de Mayo de Buenos Aires y marchó hacia el Ministerio de Defensa argentino para repudiar la reforma del sistema de defensa que dispuso la participación de las Fuerzas Armadas en cuestiones de seguridad interior.
Con la consigna «Fuerzas Armadas represivas, ¡nunca más!», la marcha fue convocada por la asociación Abuelas de Plaza de Mayo, que advirtió que involucrar a los militares «en seguridad interior genera muertes, tortura y desapariciones» y es anticonstitucional.
«No a la militarización de la Argentina. La reforma de las Fuerzas Armadas no hace más que reforzar el modelo represivo de un gobierno que representa los intereses de pocos mientras empobrece a las mayorías», denunciaron los organizadores en el documento central leído durante el acto frente al Ministerio de Defensa en Buenos Aires.
«Este plan de ajuste sólo puede imponerse con represión. Pretenden imponer el miedo como herramienta de disciplinamiento con el falso argumento de proteger objetivos estratégicos. El Gobierno está reeditando la teoría del enemigo interno para intentar acallar las protestas sociales y contener las crecientes movilizaciones con las que nos manifestamos en todo el país en repudio a las políticas antipopulares del macrismo basadas en las exigencias impuestas por el Fondo Monetario Internacional», señalaron.
También adhirieron a la marcha las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, el Centro de Estudios Legales y Sociales, la Confederación General del Trabajo y varios partidos opositores, entre ellos varias ramas del peronismo y agrupaciones de izquierda.
La reforma del sistema de defensa nacional dispuesta por Macri a través de un decreto presidencial habilita a los militares a participar en operaciones de seguridad interior y en la custodia de objetivos estratégicos, cuando antes sólo podían actuar ante amenazas desde el exterior por parte de otros Estados.
La implicación de las Fuerzas Armadas en cuestiones de seguridad interior generó repudio en gran parte del arco opositor y organizaciones de diversos sectores, luego de la dictadura militar que gobernó Argentina con cruentos métodos represivos entre 1976 y 1983 y dejó 30.000 desaparecidos, según estimaciones de los organismos de derechos humanos.
El presidente aclaró que su objetivo es modernizar las Fuerzas Armadas para enfrentar las nuevas amenazas, pero no actuarán en caso de delitos comunes. «Lo que van a hacer es complementar a las fuerzas de seguridad en la lucha contra el narcotráfico, con apoyo logístico», explicó.
«En el siglo XXI no hay posibilidad de un conflicto bélico con Brasil o Chile, lo que hace falta es que los miembros de las Fuerzas Armadas estén listos para defendernos del terrorismo, el narcotráfico, del cibercrimen», declaró Macri a una radio de la ciudad de Rosario.
El jefe de Estado subrayó en tanto que «no se puede seguir planteando todo en función de un episodio trágico y lamentable que pasó hace 50 años».
En el mismo sentido, el ministro de Defensa, Oscar Aguad, aclaró en tanto que «las Fuerzas Armadas no van a intervenir en conflictos sociales ni van a patrullar ciudades».
Diputados de diversos partidos de la oposición, entre ellos kirchneristas, peronistas y de izquierda, presentaron diferentes proyectos de ley para que la reforma aplicada por decreto presidencial sea votada en el Congreso y hoy solicitaron que se realice una sesión especial para tratar estas iniciativas.
La reforma militar fue cuestionada por el ex canciller y actual diputado del Parlasur Jorge Taiana, quien la consideró «un despropósito».
«Las Fuerzas Armadas tienen una misión, una organización y una estructura que están pensadas para el combate contra el Ejército de un Estado enemigo. No tiene ningún sentido transformarlas en agentes auxiliares de las fuerzas de seguridad para combatir el delito organizado, que es un objetivo que persigue Estados Unidos en la región», sostuvo Taiana, un político peronista de estrecha llegada a la senadora y ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015).
Taiana advirtió que «en todas partes donde se ha metido al Ejército a luchar contra el narcotráfico se lo ha contaminado, hay varias experiencias en la región».
Por Cecilia Caminos (dpa)